Saturday, September 29, 2007

El Día de Mi Cumpleaños

Cada 2 de Octubre se cumple un año mas desde mi nacimiento. Esta fecha, a comparación de la gran mayoría de personas no me emociona en lo absoluto. Yo soy del grupo de personas que no le gusta celebrar su cumpleaños. Nunca organizo reunión alguna, no invito a nadie, no hago nada fuera de la común. Para mi siempre fue un día mas como cualquier otro.
Algo que es inevitable es recibir las visitas de los familiares mas cercanos en mi casa para lo que sería una pequeña celebración. En verdad no tengo ningún inconveniente de pasarla con ellos ya que lo único que hacen es demostrar cierto afecto que siempre es bien recibido. Pero en todo caso esta "celebración" no deja de ser una simple reunión familiar como tantas otras que hay.
Quizás esta desidia personal por no celebrar mi cumpleaños hace que no tome mucho en cuenta los cumpleaños de los demás. Suelo ser bastante ingrato con la gente que me aprecia, casi nunca llamo a nadie y menos los visito. Son pocas las ocasiones que asisto a una reunión por el cumple de alguien. Lo peor de todo es si me acuerdo de las fechas y si así no fuera siempre hay alguien que me pueda hacer recordar, el problema se da cuanto digo: "de ahí lo llamo" y dejándolo de lado nunca llego a comunicarme.
Por mucho tiempo tuve una mala racha en la época de mi cumpleaños. Por un lapso de 5 o 6 años (entre los 13 y los 18) pasaba mi cumpleaños enfermo en cama. Así también el hecho de no recibir muchos regalos hace que ese día no tenga una connotación especial. No puedo negar por nada del mundo que es bastante gratificante tener la atención de la gente, ver sus muestras de afecto, sus demostraciones de cariño, es reconfortante saber que hay gente que de una u otra forma te tiene presente, con un mail, un mensaje de texto, una llamada, un pequeño presente o una simple visita.
Este año no será la excepción; mi familia llegará a mi casa, mi padre me organizará un almuerzo el fin de semana mas próximo a la fecha, recibiré las llamadas de mis amigos y conocidos, así como algunos mail y uno que otro mensaje de texto. Así también cada año me propongo ser un poco menos ingrato con la gente que quiero y creo que he mejorado pero definitivamente me falta mucho camino por avanzar.
Este martes es mi cumple, para variar ese día me despertare temprano para ir al tenis, volveré a mi casa para desayunar y alistarme para ir a trabajar. Llegare a la oficina cerca de las 9 de la mañana, transcurrirá el día como cualquier otro. Así como cualquier día saldré cerca de las 7 pm de la oficina camino a mi casa. En mi casa estará mi mamá, mis hermanos y mi abuelo (que por unas semanas esta viviendo en mi casa), estaré con ellos un rato, mi padre como cada martes llegara cerca de la media noche. Cuando él llegue yo ya estaré dormido para levantarme al día siguiente y esperar un año mas el día de mi cumpleaños.

Monday, September 24, 2007

No es Hoy

Desde hace días estoy con la intención de escribir algo nuevo para el blog pero no tengo nada mas que contar. He escrito algunas cosas en estos días, pero nada digno de mostrar y publicar. Creo que es el estado de animo y la misma situación que vivo la que no me deja hacer las cosas como uno las quiere y planea. Siento que todo lo que hago no lo hago bien, que las cosas que antes creía que podía controlar y manejar hoy se me escapan de las manos. Nada de lo que escribo me gusta y por ratos siento que la soledad que solía ser cómplice de mis mejores momentos de lucidez y pensamientos no es mas que la culpable de mia mas profundos aburrimientos, tristezas y depresiones.

Días como estos hacen que las ganas de hacer las cosas bien las dejes de lado por el simple hecho de cumplir con las obligaciones básicas y dedicar el tiempo a pensar que estas haciendo mal, cual es la causa y cual la solución. Lo peor de todo es cuando los pequeños detalles se acumulan y no dejan de mortificarte. Hoy fui al banco para cambiar unos datos de mi cuenta (dirección y teléfonos), como no tenia efectivo a la hora de salir decido ir al cajero para retirar dinero para poder almorzar. Sin darme cuenta ingreso mi tarjeta de crédito pensando que era la de débito. Como es lógico las claves son diferente; después de dos intentos fallidos me percate que no era la tarjeta correcta la que había insertado, cuando quiero poner la clave correcta, mi mente entra en un trance total, se me nubla el pensamiento para luego quedar en blanco y no saber que números digitar. Cuando quise reaccionar mi tarjeta de crédito ya había quedado retenida por el banco. Entre de nuevo a plataforma para que resolvieran mi problema, después de unos tramites tengo que volver mañana a recoger una nueva tarjeta. Esta gracia me costo tiempo y el hecho de no almorzar ya que no tenia tiempo ni efectivo para hacerlo, aparte estaba de peor humor y sin apetito.

Estas son las cosas que hacen negro un día gris, que los pocos ánimos y ganas queden sepultadas y solo desees que el día acabe para esperar que amanezca de nuevo pensando que mañana podría ser un mejor día. Yo por mi parte estoy bastante aburrido de cómo están las cosas hoy, ando de mal humor casi todo el día, tengo dolores constante de cabeza y no dejo de pensar cual sería la solución. A veces, haciendo una retrospectiva, me voy cuenta que mi actitud no ayuda mucho (en vardad no ayuda nada), de esta forma siento que le he dado la espalda y he ignorado senda oportunidades de mejora solo por el simple hecho de querer estar solo y recluido en mi mundo.

Hay días en lo que tengo todas las intenciones de hacer las cosas bien, de mejorar, de dar ese paso, de apresurarme a ese cambio, me despierto de buen animo y me levanto de mejor humor, llego con entusiasmo a la oficina y me repito a mi mismo que hoy es el día clave, el día “D”, el punto de quiebre pero lamentablemente hoy no es un día de esos. Hoy quiero que el día ya acabe para ir a mi casa, descansar y publicar este post.

Sunday, September 9, 2007

El Día que me Vaya

Cada día que pasa es un día menos que me queda por vivir en mi casa. Estoy en los preparativos finales para lograr mi deseada independencia y poco a poco la incertidumbre de cómo será el futuro va creciendo. Poco a poco los nervios van aumentando y así con ella también la melancolía y la tristeza de dejar todos los recuerdos y toda una vida atrás para seguir adelante con el ciclo de la vida.

Definitivamente hay muchas cosas que voy a extrañar, desde las mas banales como el trato preferencial que recibo por parte de las dos chicas que dedicadamente trabajan día a día en las labores caseras hasta días como hoy. Extrañar un domingo como hoy, donde toda la familia se reúne desde temprano en cocina para desayunar, para conversar para sonreír, días como hoy donde planeamos juntos el menú del día, cada uno dice que es lo que quisiera comer y mi padre dedicadamente se encarga de complacer. Días como hoy donde todos nos juntamos alrededor de una mesa para almorzar y compartir juntos, días donde mi madre reniega por todo el desorden que mi padre dejo en la cocina, donde mi padre molesta a mi hermano por no querer comer todo lo que prepara, días como hoy donde mas que nunca puedo bromear con ellos, puedo molestar a mi hermana y recibir sus golpes por su falta de paciencia.

Así también voy a extrañar mi habitación, donde la magia suele ocurrir, mi refugio privado, mi espacio y mi tiempo. Es el lugar donde soy completamente feliz, mi habitación se convirtió en mi propia burbuja, en mi maquina de tiempo donde puedo pasar horas sin ser interrumpido, puedo leer y escribir sin que nadie moleste, puedo encerrarme y olvidarme que hay algo afuera de esa puerta.

Voy a extrañar a mi perro, fiel amigo y compañero. Incondicional a la hora de hacerte compañía, siempre mirándote con esos ojos tristes y los cachetes caídos, siempre dispuesto a moverte la cola por unas palabras de cariño y un poco de afecto.

Dejar a mis papas y hermanos tras 24 años juntos es un poco doloroso, con ellos he pasado grandes momentos, viajes, celebraciones y un largísimo etc. Me acuerdo cuando compartía habitación con mi hermano mayor, llego un punto que lo odié, no aguantaba sus hábitos, su desorden, sus olores, sus gustos. Llegue al punto de agarrar mi cama y moverla al cuarto de depósito para hacer de ese pequeño espacio mi nueva habitación. Al comienzo era imposible dormir ahí porque no tenia ni cortinas y como era el cuarto que tenia salida a las escaleras de servicio todo el mundo pasaba encima mío para poder usarlas. Así también mis cosas compartían espacios con la maquina de ejercicios y las herramientas, fue un desastre, pero aún así era mió. Tanta pena le di a mi papá que techaron parte del patio interior de la casa y construyeron un cuarto para mí (donde estoy ahora).

Dejar mi casa es parte del ciclo natural que quiero afrontar, es parte de mi propio crecer y madurar, es dejar todas la facilidades que te pueden brindar por buscar tu propio destino. He decidido irme de mi casa porque creo que a estas alturas de mi vida es necesario, muchos me dicen que es una locura dejar todo lo que tengo y todo lo que mis padres me dan por un simple capricho pero no es así, yo creo que es algo mas importante pero que definitivamente me va a costar mucho pero estoy dispuesto a asumirlo y mientras tanto seguiré sufriendo con la melancolía hasta el día que me vaya.

Thursday, September 6, 2007

El Punto de Partida (El siguiente paso)

Cuando uno pasa una etapa oscura sabe, escucha, le aconsejan que es simplemente temporal que todo pasara y no hay mal que dure 100 años. Lo importante es dar el siguiente paso para seguir adelante y no quedarnos estancados.
Hay situaciones dificiles donde uno ni siquiera tiene la mas minima intención de salir del mal momento e inconsientemente quiere seguir sintiendose mal, lamentandose por lo trágica de su situación, maldiciendo su suerte y estancado en el pasado. Felizmente eso sería como una subetapa dentro de la etapa de recuperación. Es un estado que a todos les pasa, simplemente a unos les dura mas que a otros, pero nadie se salva. Es imposible que alguien despues de una ruptura dramatica se levante al día sigueinte de buen animo y con todo el espiritud para seguir con su vida sin problemas.
Los mortales como yo, nos solemos sentir mal, felizmente tengo muy buenos amigos que se que siempre van a estar ahi, se que no es necesario llamarlos para sentir su apoyo, asi tambien mantengo una rutina laboral bastante atareada que me mantiene ocupado el 80% del día. Eso me ayuda a concentrarme en mis cosas y pensar un menos en lo demas. Y sobre todo tengo este blog (que creo que solo yo lo leo) donde puede expresar todo eso que siento sin reprimirlo ni esconderlo. Con todas estas cosas a mi favor creo que el proceso por mas doloroso que sea siempre es un poco mas llevadero.
Otro punto a favor es que todo esto me impulsa a comenzar ese cambio que estaba buscando desde hacia un buen tiempo atras pero que por las circunstancias no se daba. Tenia planes de independencia familiar desde hace bastante tiempo y nunca los habia podido ejecutar, hoy mas que nunca estoy dispuesto a salir del seno familiar e independizar de una vez. Valerme por mi mimso, vivir en mi propia casa (un depa alquilado) y asumir todas las responsabilidades que esta desición contrae.
Hoy amanecí de buen humor, hoy amanecí con ganas de que sea un día distinto, amanecí con ganas de hacer un día diferente. Esta bien sentirse mal porque la situación lo amerita pero siempre hay un punto de quiebre y sobre todo hoy amanecí con todas las ganas que hoy sea ese punto de quiebre, el punto de partida de lo que será mi nueva vida.

Sunday, September 2, 2007

Marena, Pamela y las Cartas (Parte II)

Paso el tiempo y en el último ciclo que iba estudiar ingles (ese mes dejaba el ingles para estudiar en la pre para ingresar a la universidad) me encontré en el mismo salón que Joselyn. Por mas que había pasado un par de años desde la única vez que la había visto, nos reconocimos, ella había crecido bastante, ya había dejado la cara y el cuerpo de niña, me acuerdo que me gusto mucho. Le pregunte sobre su hermana, como estaba, que estaba haciendo, me contó que le iba bien, que había ingresado a la universidad y que estaba estudiando psicología. Intercambiamos datos y al poco tiempo estaba entablando una nueva relación amical con Pamela. Nos llamábamos a diario y pasábamos horas en el teléfono, los fines de semana la llamaba desde la playa, le quitaba el celular a mi papá y en las noches me iba a la orilla del mar a conversar con ella , le encantaba escuchas el mar como música de fondo en nuestras conversaciones.

Así pasamos todo el mes, hasta que el día que regresaba de buscar academias a fines de ese mes (Marzo -2000), ella llamó a mi casa, estaba en al esquina y quería verme. Salí a recibirla y nos fuimos al parque a conversar. No había cambiado, seguía igual de hermosa. Tomó nuevamente sentido el porque me había enamorado de ella años atrás.

Durante toda la tarde y esa noche nos dedicamos a conversar sobre nosotros, que habíamos hecho en esos años sin vernos, en que había cambiado nuestras vidas. Mucha de esa información no era nueva ya que el último mes había hablado de todo pero no importo en ese momento, poco a poco la conversación se torno más personal, al punto que la amistad llegó mayores y nos dejamos llevar por el momento. Pasamos una tarde increíble y por como se dieron las cosas y sobre todo por como quería que se dieran las cosas, los dos entendimos que ese era el inicio de una relación amorosa.

El encanto nos duro poco, el día siguiente la fui a recoger después de sus clases y la acompañe a su casa. Los siguientes días solo hablábamos por teléfono, nuestros horarios y tiempos no concordaban. Lo peor vino cuando su madre no aprobaba las llamadas constantes, cuando ella contestaba no había problema, pero cunado su madre era la que levantaba el telefono tenia que aguantar un sermón previo sobre lo valioso de su tiempo y que mis llamadas perjudicaban sus estudios.

Pasamos más de un mes sin vernos, después de una de las tantas llamadas quedamos en vernos para conversar. Llegue a su casa a la hora pactada, pero ella no estaba, hice tiempo dando vueltas, pero seguían pasando los minutos y ella no aparecía, cuando estaba apunto de irme ella se apareció, fuimos a la puerta de su casa. Me dijo que lo nuestro no iba mas, que era imposible seguir así y que no íbamos a llegar a nada. En verdad era lo que me esperaba y lo que habíamos hablado en el pre-ambulo telefónico, pero aún mantenía las esperanzas de que la situación cambiase para bien, pero no fue así, nos despedimos como amigos y esta vez si nunca más la volví a ver hasta el día de hoy.

Pasó algo mas de un año, yo ya estaba en segundo ciclo de la universidad cuando una tarde regresando de clases mi madre me informa que vino una tal Pamela a buscarme para despedirse porque estaba viajando a Estados Unidos a estudiar y quería despedirse de las personas que conocía. Me dejo un post it con su nombre y numero. En un primer momento quería llamarla, pero lo deje para después, no le preste mucha importancia, días después cuando quise hacerlo el numero ya no estaba, lo había perdido. Nunca la llame, nunca me despedí.

Hubieron muchas cosas que nunca supe y nunca sabré. Después de la despedida navideña años atrás, decidí olvidarme del tema y queme todas las cartas que Marena me escribió (no saben como me arrepiento de haberlo hecho), nunca le pregunte si era ella en verdad la de las cartas, si Marena en verdad existía o era solo el alter ego de esta chica sentimental y expresiva que se escondía en el anonimato para dar rienda suelta a su vena literaria, no lo se y supongo como muchas cosas en esta vida que nunca lo voy a saber.

Marena, Pamela y las Cartas (Parte I)

(Marzo - 2000)
Ese día regrese -después de buscar academias pre universitarias- a mi casa y apenas estoy entrando suena el teléfono. Era Pamela una amiga que no había visto hacia varios años. Estaba hermosa como siempre, con ese pelo ensortijado oscuro, esa mirada de niña buena, la sonrisa en el rostro y esos hoyitos en las mejillas que te trasmiten una alegria casi contagiosa cuando sonríe.

Salía de la casa de una amiga, estaba camino a la suya cuando decidió llamar a mi casa desde el teléfono público de la esquina. Salí a recibirla y nos fuimos a conversar al parque cerca de mi casa.

Tres años atrás, un día cualquiera encontré entre mis libros y cuadernos de ingles una carta. Era de Marena y estaba dirigida hacia mi, hasta ese momento, nunca nadie me había escrito una carta de ningún tipo. En una primera impresión me pareció la carta mas hermosa que había leído en mi vida, después de un poco de reflexión y varias releídas me di cuenta que mi opinión era bastante subjetiva basado en el hecho que era la única carta que había recibido.

En esta me hablada de cuanto le gustaba, que a lo lejos y en el anonimato me contemplaba y se ilusionaba al verme, que quería conocerme pero no sabia como acercarse y hablarme, tenia miedo de ser rechazada y que yo no correspondiera a su afecto de manera proporcional.

Al comienzo pensé que era una broma de mal gusto a la cual no le preste mucha importancia, tenía unas amigas en el salon las cuales creía capaz de hacer una broma de esta magnitud. De esta manera pasaron los días y las cartas seguían llegando.

Poco a poco me fui ilusionando con su manera de narrar sus sentimientos y percepciones de las cosas. En cada carta me escribía un poco de su vida, que hacia, donde estudiaba, donde vivía, como era su familia, el origen de su nombre, la fecha de su cumpleaños y demás datos. Yo sentía que la conocía sin siquiera haberla visto y sentía (por sus palabras) que ella me conocía solo viéndome.

Pasamos casi un mes en este recibir constante de cartas, hasta que una ultima oportunidad dentro de la carta me envió un collar. Era un collar de cuero negro de donde colgaba un dije en forma de rostro sonriendo, era una placa redonda de metal con tres agujeros haciendo de ojos y boca. En esta carta me preguntaba si yo quería conocerla, ella no esperaba una carta por mi parte, si mi respuesta era positiva, o sea si yo quería conocerla, tenia que dejar ese collar en la maceta al costado de las escaleras antes de entrar a clase. De esa manera ella me enviaría una futura carta donde me daría mas indicaciones de como nos conoceríamos.

Yo no sabia si quería conocerla, por un lado sabia de la impresión que ella tenia de mi sin haberme hablado en su vida y temía que se decepcionara si me llegara a conocer bien. Así yo también tenia miedo de encontrarme con alguien diferente a la persona que escribía las cartas. Es decir, yo a través de sus cartas me había formado la imagen de una persona, le había dado rostro, cuerpo y expresiones. En mi mente Marena tenía el aspecto que yo me había creado en base a sus palabras. Es así que decidí no dejar el collar en la maceta.

Es día era el ultimo día de clases del ciclo y por ser Diciembre, la ultima clase del año. El mes siguiente mi horario iba a cambiar ya que en verano solía estudiar en las mañanas y no en las tardes. Cuando estaba despidiéndome de mis amigos antes de salir, se acerca una chica que ante mis ojos era una chica preciosa con mirada dulce y sonrisa angelical. Se presento, me dijo que se llamaba Pamela y que era amiga de Marena. Me dijo que su amiga se sentía mal por mi negativa de no querer conocerla, así que ella se ofreció a hablar conmigo para ayudarla e intentar cambiar mi parecer.

Le dije para salir de ahí e ir a conversar a un lugar mas tranquilo, así que caminamos un par de cuadras hasta el parque en queda cerca a mi casa. La conversación sobre Marena solo duro unos 10 minutos, el resto de la tarde hablamos sobre nosotros. Ella me contó sobre su vida, que hacia, donde estudiaba y demás datos que de alguna manera concordaban mucho con los de Marena, me contó sobre sus gusto por la buena lectura y como le fascinaba escribir.

Desde ese momento me enamore de ella, los siguiente días nos vimos para seguir conversando y el tema de Marena salio de nuevo a flote. En esos días no dejo de mencionarla en ningún momento. Yo buscaba una conversación sobre nosotros pero ella no dejaba de incluir a su amiga. Yo por el solo hecho de salir con Pamela no me importaba pasarme toda la tarde hablando de su amiga.

La última vez que vi a Pamela fue el día de navidad, ella llego a mi casa y me dijo para ir a caminar cerca, quería llevarme a la casa de Marena para saludarla. Caminamos bastante y llegamos a una urbanización a varias cuadras de mi casa (la cual hoy en día no me acuerdo cual es ni como llegar). Me dejo esperando en el patio, afuera de un edificio, mientras ella entraba a hablar con su amiga. Después de varios minutos de espera Pamela bajo sola y me dijo para irnos de ahí. Ya era tarde, estaba por oscurecer y teníamos que regresar a nuestras casas. Nos despedimos y fue la ultima vez que supe de ella. Nunca más me llamo y yo tampoco la busque.

Pasaron 3 meses y la volví a encontrar en la academia. Nos vimos y nos saludamos como si fuéramos dos amigos de toda la vida que no se habían visto en años. Me acuerdo que les causaba muchos celos a mis demás amigas, cosa que no me importaba. Era marzo del 98, ella estaba en 5to de secundaria y ese era el último ciclo que iba a estudiar ingles ya que iba a comenzar a estudiar en la pre para ingresar a la universidad. En ese mes conocí a su hermana menor, se llamaba Joselyn (12) (en verdad no estoy seguro como se escribe), era una niña en ese entonces que también estudiaba en la academia. Durante ese mes nos vimos poco tiempo y casi nunca a solas. Cuando nos despedimos quedamos en buscarnos pero fue algo que nunca prospero, nuevamente no la volví a ver en mucho tiempo.

La Aventura Brasileña

Despues de un fugaz paso por Santiago de Chile y Buenos Aires en Argentina, llegamos a Sao Paulo ,el ultimo destino de la gira pero el que sería el punto de partida de la aventura brasileña. Habiamos salido de lima 15 dias atras para seguir un programa promovido por la universidad de visitas empresariales en estos tres paises. Todo habia transcurrido de la forma como estuvo planeado sin contratiempos ni inconvenientes.

El Miercoles en la noche comenzo el festejo. Era la ultima noche del programa y se organizo una pequeña celebración. Despues de la cena de rigor salimos en busca de diversión la cual nunca encontramos hasta regresar al hotel para que en una habitación nos encerraramos la mayoria a tomar, fumar y celebrar. Al día siguiente habria que tomar un vuelo para regresar a Lima.

Eramos unas 20 personas de las cuales 6 nos quedamos en Brasil. De esos 6, 2 se quedaron en Sau Paulo por motivos personales, los demas nos dirigimos hacia Rio de Janeiro. Este viaje lo habia planeado con Juancarlos (Trux) desde Lima semanas antes de partir. Ibamos a pasar el mejor fin de semana en Rio. Durante las dos semanas del programa nos enteramos que 2 amigas tambien se iban a Rio ese fin y que habian cambio su fecha de regreso a Lima al mismo dia y vuelo que nosotros. En esas dos semanas nos conocimos muy bien y creamos una amistad bastante interesante asi que de alguna manera nos comprometimos a ir juntos a Rio.

El jueves cuando nos despertamos vimos que el grupo ya habia partido y solo nos quedo arreglar nuestras cosas para ir a la estación de buses que nos llevara a Rio. Trux y yo ya teniamos reservaciones en Rio, mientras Vane y Judith estan llendo a ciegas. El camino de Sau Paulo a Rio es de 6 horas en bus. Salimos cerca de medio dia y llegamos a las 6 pm a la estacion de Rio donde ya teniamos un auto que nos esperaba para llevarnos al hotel.

Esa noche salimos alrededor del hotel a buscar algo de comer, ver un poco el ambiente y conocer los alrededores, es asi como llegamos a un centro comercial que estaba ubicado a unas pocas cuadras del hotel. Ahi comimos y pasamos el resto de la noche hasta volver al hotel y planificar lo que sería un fin de semana en Rio.

Al dia siguiente salimos del hotel a caminar por los alrededores, fuimos a la playa, tomamos el metro, fuimos a lo que sería el mercado central, hicimos algunas compras, comimos en el centro comercial cerca al hotel y paramos un taxi que sería nuestro guia y nos llevaría a los puntos mas importantes de la cuidad. Es asi como fuimos a por la Bahia, las playas de Lebron, Ipanema y Copacabana. Nos llevo al mirador y al Cristo Concorvado. Camino por el malecón de la playa nos topamos con un argentino que nos ofrecio un tur por las playas Buzios a un precio especial. Nos esplicó que trabajaba para una agencia y salia a buscar turistas en las playas para ofrecerles los paquetes. De esta forma aseguramos el tur para el dia siguiente.

Esa noche salimos en busca de diversión. Tomamos un taxi y salimos a un zona que nos recomendaron en el hotel. Era un zona bohemia, parecido al barranco limeño, con bares antiguos, bastantes tipicos y con caras poco amigables, con muchos indigentes en las calles, niños limosneros, con viejos timberos en un esquina y putas en otras. No duramos mas de 20 minutos en esas calles para que regresaramos sin penas ni gloria al hotel.

Para el día sabado nuestros planes de ir a buzios se vieron frustados porque las lluvias hacian que el viaje sea imposible, asi que nos ofrecieron cambiar el tur por otro que salia hacia las islas tropicales. Estas islas se encuentran en lado norte de Rio a 2 horas por bus, son populares por estar en medio de un paraje tropical de aguas critalinas, arrecifes, corales y una increible arena blanca. Muchas de estas islas tienen dueños famosos como actores, cantantes, deportistas y politicos.

El paseo fue espectacular, tomamos sol, bebimos cerveza helada, nos bañamos en la tibias aguas, almorzamos en el bote y nos divertimos mucho. Uno de los ultimos punto donde anclo el barco era una playa desierta en una isla tropical, donde los montes verdes convergian con las arenas blancas y las aguas calientes de lo que sería el paraiso estereotipado al común de los seres humanos.

En el bus de regreso al hotel vimos al sol ocultarse y con él nuestras fuerzas hasta caer dorminos y recién despertar en las puertas del hotel. Despues de continuar con el descanzo y su respectivo baño, nos alistamos para salir a festejar ese sabado en Rio. Esta vez tomamos mas precauciones y nos informamos mejor de donde ir a bailar y tomar. Nos recomendaron un buen lugar donde ir, era una discoteca de moda donde la diversión estaba asegurada. Al parecer tenian mucha razón ya que el local estaba tan lleno y habia tanta gente alrededor que no pudimos entrar, en su lugar decidimos preguntar por otro lugar y nos señalaron que a pocas cuadras hacia el lago habia una discoteca tan buena como esa.

Este local quedaba en frente al Lago Rodrigo de Freitas. Una discoteca super moderna y por ende bastante cara. Aún así la pasamos bastante bien. Bailamos, tomamos, fumamos y nos divertimos bastante. A la salida caminamos un poco por el malecon, nos tomamos unas cuantas fotos y tomamos un taxi hacia el hotel.

Al día siguiente salimos a caminar por la playa, habia una pequeña feria en la calle donde hicimos algunas compras, me acuerdo haber comprado algunos recuerdos para regalar a mis amigos y familiares, el resto del día me la pase en hotel, en la piscina para ser mas preciso, mientras los demas fueron de compras y a la playa.

Ese domingo temiamos que dejar el hotel pasado el medio el día, de otra manera nos cobrarían un dia mas y eso ya se escapaba de nuestro presupuesto. Mi viejo ya me habia enviado mas dinero y encima el dinero que estaba destinado a comprar algunos encargos tambien fue destinado a mi consumo.

Nuestro vuelo salia el lunes a las 8am desde el aeropuerto de Guarulos en Sao Paulo, por una cuestion de temor teniamos que salir de Rio en la tarde para llegar antes de que anochesca a Sao Paulo ya que salir de madrugada del terminal es una de las cosas mas peligrosas que hay.

Es asi como tomamos el bus que salia a las 4 para llegar a las 10 pm a nuestro destino y en ese mismo instante tomar un taxi que nos lleve al aeropuerto. Despues de negociar con los taxista por una tarifa flat en lugar de soltar el taximetro, llegamos cerca de media noche a Guarulos.

Habia poco movimiento a esa hora de la noche, algunos negocios ya estaban cerrados y ningún counter estaba atendiendo. Desde las 12 hasta las 5 am no sale ningun avión, asi que no nos quedo otra opción que descanzar el resto de a noche. Por ratos permaneciamos hechados cerca a nuetras maletas mientras que por otros deambulabamos por el lugar viendo los alrededores e instalaciones.

La noche fue bastante larga, ninguno de los 4 pudimos dormir y poco a poco vimos como el sol salia, los negocios comenzaban a abrir sus puertas y los counters comenzaban a atender. Fuimos de los primeros en registrarnos y entrar a la sala de espera para abordar el vuelo. Por cuestiones técnicas el vuelo se retraso un par de horas. Nuestros amigos que regresaron el jueves anterior nos contaron sobre lo mal del vuelo que tomaron, el avion a los 15 minutos de despegar tuvo que regresar porque tenia desperfectos mecaninos, los hicieron abordar dos veces mas para volver a informarles que el vuelo no podia partir. Estuvieron retrasados por mas de 6 horas hasta que pudieron tomar (ya con miedo) el avión de regreso a Lima.

Una vez en el avión, nos separamos, nunca nos despedimos. Vane y Judith se sentaron lejos de Trux y yo. Abordamos sin decirmos una sola palabra, durante el vuelo nunca nos acercamos a conversar y una vez que llegamos al aeropuerto de Lima ya no las volvimos a ver. Fue un viaje bastante raro, la pasamos bien y nuestra amitad nunca transendio mas de los limites establecidos implicidamente por nosotros.
Nos volvimos a ver despues de varias semanas en la universidad pero nunca fue lo mismo. Habia algo raro en esa relacion de amitad que creamos en tierras brasileñas. Aún las recuerdo con cariño y me da cierta lastima que la amistad no haya trasendido en una mayor magnitud. Aún así fue una experiencia que nunca voy a olvidar. Conocí mucha gente, conocí otros aspecto de gente que ya conocia. Siempre se aprende algo nuevo. Yo por mi parte tengo planeado volver uno de estos dias para volver a vivir y revivir mi propia aventura brasileña.